Se le denomina a la última gran guerra. Esto será en el gran valle de Megido que está en medio de Palestina desde el Mar Mediterráneo hasta el río Jordán. Tiene 300 kilómetros de largo y 15 de ancho.
La gran batalla de Armagedón es la batalla final de la historia humana. Todos los ejércitos del mundo protegerán sus propios intereses, llegaran a Megido, se unirán formando un solo ejército que estará listos para exterminar a los judíos y obtener todo el petróleo de Medio Oriente. Aquí es cuando Jesucristo interviene y detiene la locura y la maldad de la humanidad.

lunes, 27 de agosto de 2012

Un frente común...


“El hombre se alegra con la respuesta de su boca; 
Y la palabra a su tiempo, ¡cuán buena es!”…
Proverbios 15:23

Alfredo A. Calderón Cámara
En todos los tiempos y en todas las instituciones existe el sentimiento del deber. Quimérico sería decir que se cumple al cien por ciento; sin embargo, hay quienes tienen arraigado ese sentimiento al grado que llega a convertirse en una pasión de servicio; pocas personas el columnista ha conocido como la jefa de Trabajo Social del Hospital General del ISSSTE “Daniel Gurría Urgell”, Zulima Zavala Montejo de profesión Licenciada, ella fue precisamente la encargada de organizar el evento Día de la trabajadora social, en el cual el Delegado Estatal Abel Rivera Rangel, diera al suceso otra dimensión entre aquellas instituciones que viven deshumanizadas y aisladas y las entidades de servicio que son el reflejo de los ideales de servicio, desempeñando las funciones apropiadas a sus aptitudes con el deber social que dicta que cuanto más intensa es la fe en el servicio, más imprescindible es el sentimiento que compele al gesto amable y la sonrisa que constriñe a la buena atención. Ahí Rivera Rangel entregó reconocimientos a lado de Walter Ramírez Izquierdo y Pedro Luis Bartilloti Cahero y no dudó en arengar con beneplácito “estuvimos para dar un reconocimiento a la labor y el esfuerzo al trabajo social y exhortar a seguir trabajando e impulsando a estos ángeles que al igual que los doctores y las enfermeras quitan la ansiedad de nuestros pacientes y derechohabientes con un trato digno y de calidad son un pilar fuerte dentro del ISSSTE”.
El sentimiento del deber absoluto en la conciencia de cada quien- es relativo a la justicia de la sociedad. Habrá quien se niegue a reconocer el loable ejercicio que hacen las trabajadoras sociales del hospital general del ISSSTE, pero las palabras de Abel Rivera reflejan el total reconocimiento que con poco se está haciendo mucho. Mirar hacia el interior del ISSSTE en los últimos tiempos es conocer las entrañas de lo que Abel Rivera Rangel ha logrado unir voluntades, reestructurar conciencias y lograr que un complejo sistema sobre el cual descansa la estabilidad de salud de los derechohabientes de esta institución; también es mirar que ha quienes no logran alcanzar las metas, pero son de manera aislada dentro del organigrama; los más decenas de médicos, enfermeras, radiólogos y trabajadoras sociales concurren a todo esfuerzo que tienda al mejoramiento de esta institución; por eso, las palabras de Rivera Rangel no son vanas, sino de cómo el trabajo es bello y amado cuando representa la aplicación natural de las vocaciones y de las aptitudes, las palabras del Delegado Estatal no son otra cosa sino, que la espiga es cosecha propia de quienes la siembra.

Pocos, muy pocos, podrían rebatir todo el capital humano que Zulima Zavala Montejo ha dejado a lo largo de sus años de servicio en el ISSSTE, desempeñando con eficacia las funciones apropiadas a sus talentos, las victorias de servir a diario a quienes tienen internados sus pacientes, son satisfacciones muy por encima de las derrotas de tener que luchar contra lo imposible. Ahora bien, Abel Rivera Rangel es un profesional que entiende que a diario se lucha contra viento y marea para satisfacer todas y cada una de las condicionantes de la demanda social; pero él mejor que nadie sabe, que con cada recorte y sacudida de la macro economía del gobierno federal, el presupuesto de la institución sufre infartos y convulsiones que dejan no pocas veces en camilla la viabilidad de arribar a mejores estadios de atención. De una u otra, es natural que el Delegado Estatal sea el primero en reconocer la labor de sus trabajadoras sociales, máxime que desde que llegó ha tratado de lograr unir a todos en un frente común…

EL SEPTIMO SELLO
El respeto al trabajo social, se mide por la austeridad de trabajar con lo indispensable, valorando los altos beneficios que reciben los miles de derechohabientes que día a día son atendidos en sus demandas…

LA SEPTIMA TROMPETA
La mejor fórmula del trabajo social es cumplir con todos los deberes correspondientes que lo obligan a lo mínimo. También puede revisar esta columna en el blog http://alfredocalderon.blogspot.com/
. Delaciones, chivatazos y confidencias al teléfono 99 33 18 21 65…

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