Se le denomina a la última gran guerra. Esto será en el gran valle de Megido que está en medio de Palestina desde el Mar Mediterráneo hasta el río Jordán. Tiene 300 kilómetros de largo y 15 de ancho.
La gran batalla de Armagedón es la batalla final de la historia humana. Todos los ejércitos del mundo protegerán sus propios intereses, llegaran a Megido, se unirán formando un solo ejército que estará listos para exterminar a los judíos y obtener todo el petróleo de Medio Oriente. Aquí es cuando Jesucristo interviene y detiene la locura y la maldad de la humanidad.

viernes, 25 de febrero de 2011

Canibalismo laboral…


No aborrecerás a tu hermano en tu corazón; No te vengarás, ni guardarás rencor, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo....
Levítico 19:17-18



Alfredo A. Calderón Cámara
No pocas veces la prudencia de una persona es confundida con otros conceptos de quien aunque sin deberla es atacado en una batalla de baja intensidad invocándolo a una guerra sin cuartel en la cual nadie ganará; en la Secretaría de Salud, la beligerancia está creciendo dada la forma en que el veracruzano Saúl Murrieta Vega abusa laboralmente contra el médico Gerardo Díaz Martínez, quien después de ocupar una delegación sindical, optó por retornar a sus  labores cotidianas como trabajador de base del sector salud, pero encontró que tiene un beligerante enemigo en Saúl Murrieta, quien abiertamente está decidido a correrlo, sólo porque no lo soporta y tampoco lo quiere dentro de la plantilla de trabajadores a su cargo, confundiendo Murrieta Vega su ejercicio laboral con una patente de impunidad para maltratar a los trabajadores tabasqueños.
En la Secretaría de Salud no hay paz, Murrieta Vega la está trastocando, es seguro que habrá paz, cuando la justicia recobre su status laboral y gente nefasta como este abusivo médico le sean quitados los privilegios para dañar a los tabasqueños, entonces cada empleado hará su ejercicio, su diaria labor y las funciones requeridas por el perfil de puesto en que se desempeña; por lo pronto, son tiempos de un canibalismo laboral, tiempos en que la crueldad y el salvajismo se extiende para morder y lacerar la moral de los empleados, pues desde que llegó Murrieta Vega nadie está seguro, el clima cambio, se descompuso, la tosquedad y la rudeza fueron el alba de lo que se respira a diario, la fiereza y la brutalidad el siguiente eslabón de la cadena del terrorismo laboral en que sufre Gerardo Díaz Martínez en el sector salud, donde el irracional e infame pie del Director de Atención Médica trata sin conseguirlo de paralizar contra el suelo el cuello de un ex delegado sindical, que no se ha movido ni un milímetro del compromiso de defender sus derechos laborales.
Es seguro que molesto estará el Secretario de Salud Luis Felipe Graham Zapata cuando se entere de estas cosas, máxime que él ha sido siempre quien ha puesto el ejemplo de respeto, atención y solución a todos y cada uno de los conflictos generados en el sector salud, logros y resultados que son parte de los galardones con que Graham Zapata se ha distinguido como el principal exterminador del canibalismo laboral…

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