Se le denomina a la última gran guerra. Esto será en el gran valle de Megido que está en medio de Palestina desde el Mar Mediterráneo hasta el río Jordán. Tiene 300 kilómetros de largo y 15 de ancho.
La gran batalla de Armagedón es la batalla final de la historia humana. Todos los ejércitos del mundo protegerán sus propios intereses, llegaran a Megido, se unirán formando un solo ejército que estará listos para exterminar a los judíos y obtener todo el petróleo de Medio Oriente. Aquí es cuando Jesucristo interviene y detiene la locura y la maldad de la humanidad.

jueves, 3 de febrero de 2011

Los hechos convencen…


“sírvele con corazón perfecto y con ánimo voluntario”…
1ª de Crónicas 28:9


Alfredo A. Calderón Cámara
alfredocalderon@hotmail.com
“Febrero es un mes de negociaciones”; así, sin falsos aspavientos, pero acotando lo inmediato, la Rectora de la UJAT, Candita Victoria Gil Jiménez define la perspectiva y reconoce de tajo su pasión y compromiso con la estabilidad y gobernabilidad de la alma mater, clara en sus conceptos abiertamente ha ubicado tiempos y circunstancias: “Hemos avanzado y tocaré todas las puertas para conseguir los recursos que se necesitan para darle viabilidad a las demandas que ellos de manera justa están haciendo”.

El oficio político de la Rectora sabe que por encima de todas las demandas nunca ha sido bueno dejar sin voz al contrario, mucho menos menospreciar las demandas sindicales; actuar así sería una falta de sensibilidad política, sería dejar que la mezquindad mostrara el peor rostro; Candita Gil, como responsable de la gobernabilidad interna universitaria reconoce que la crisis ha afectado gravemente el bolillo de sus compañeros de trabajo, por eso llama justas sus demandas y va más allá al definir su proceder de ir a tocar todas las puertas que sean necesarias para conseguir los recursos que logren darle una salida digna para todos y la viabilidad sana de la mesa de negociaciones. Ello habla que para Gil Jiménez la gente de la comunidad universitaria merece cortesía y urbanidad, tolerancia y mesura; pues en la visión de la propia Rectora, es gente llena de respeto, ímpetu y trabajo.

Siempre ha sido conocida la capacidad y la profundidad de los mensajes que manda la responsable de la política interna de la UJAT en sus intervenciones; para ella, los llamados al diálogo y su innegable movilidad y negociación política, se han dado siempre respetando las distintas fuerzas sindicales que gobiernan la UJAT, mostrando a lo largo de su gestión que todos y cada uno pueden hacer política, pero política de la buena, la que trae beneficios para sus agremiados, y eso no es cuestión de retórica, sino de haber demostrado a lo largo de los años que Gil Jiménez ha sabido respetar y darles un lugar dentro del universo universitario a fin de que todos los líderes puedan hacer sus ejercicios sindicales dentro de los cánones de gobernabilidad y los límites de la prudencia en que deben de caminar.

Frente a los justos emplazamientos a huelga consagrados en la Ley Federal del Trabajo por parte de los diferentes sindicatos de la UJAT; hacer, del diálogo, la negociación y los acuerdos, las herramientas cotidianas del quehacer universitario por parte de Candita Gil, exhibe que todo tendrá una salida sana; de entrada, el llamado a que nadie se quede sin hacer política, pero con humildad, dándole honor a la palabra en beneficio de los más necesitados, por eso la Rectora a elevado una y otra vez la voz, para lograr todos y cada uno de los consensos que dentro de la pluralidad que no es tarea fácil, se arribe a acuerdos buenos para todos se dejen sentir en los bolsillos, mostrando que las palabras se escuchan y los hechos convencen…

EL SEPTIMO SELLO
Entre la espada y la pared se encuentran los empleados de la CFE, por un lado la sociedad los ubica como sus enemigos públicos números uno; por el otro, la deshumanizada empresa “de clase mundial” los ahorca y los aplasta al arrancarles de golpe y porrazo una de sus mejores prestaciones: el servicio gratuito de energía eléctrica, dentro de poco comenzaran a pagar este como cualquier ciudadano…

LA SEPTIMA TROMPETA
Si Leonardo Rodríguez Alcaíne resucitará, de sólo ver como son “negociadas” las prestaciones sindicales de los empleados que siempre defendió; de seguro, se moría de otro infarto. Habrá más…

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